Aumentan a diez los cadáveres de la Guerra Civil recuperados en la sima El Raso, en la sierra de Urbasa


Aumentan a diez los cadáveres de la Guerra Civil recuperados en la sima El Raso, en la sierra de Urbasa

Los restos han sido enviados al laboratorio de Aranzadi en Donostia, donde se realizarán los análisis convenientes y se cotejarán con una propuesta de identificación, que en el caso de que resulte positiva dará lugar a la entrega de los cuerpos a las familias

Imagen de uno de los esqueletos hallados en la sima de Urbasa

Diez cadáveres han sido recuperados en la sima El Raso, en la sierra de Urbasa, donde la Asociación de Familiares de Fusilados de Navarra y miembros de la sociedad Arazandi estaban buscando los cuerpos de tres navarros que fueron asesinados durante la Guerra Civil.

IRUÑEA. A las 14.00 horas de este viernes han terminado los trabajos en la sima, en los que también han intervenido dos espeleólogos, y que han sido seguidos de cerca por los nietos de dos de las personas que se sospechaba que estaban en la fosa.

En el lugar se ha encontrado además una granada, algo que no es habitual en Navarra, ya que «no había frente de guerra», según ha explicado a Efe Joseba Eceolaza, uno de los miembros de la asociación, quien ha comentado que han dado aviso a la Guardia Civil que ha enviado equipos especiales para hacerse cargo del artefacto.

Los trabajos en la sima situada en la carretera de Olazagutia a Estella comenzaron cuando las familias de Balbino Bados y Balbino García contactaron con la asociación para exhumar sus cadáveres, junto con el de Gregorio García.

En el caso de este último al no tener familia directa ha sido el Ayuntamiento de Eulate, del que fue vecino y concejal, el que ha llevado la iniciativa y el que ha expresado su disposición a hacerse cargo de sus restos, lo que ha sido destacado por Eceolaza, quien ha apuntado que es la primera vez que se encuentran con que un Consistorio se hace cargo de los restos de una persona que no tiene familia.

«Se trata de militantes republicanos que en 1936 fueron fusilados, con la singularidad de que además los arrojaron a una sima en un intento de ocultar su muerte, de lanzarlos todavía más al olvido», ha señalado Eceolaza.

Tras pedir los permisos pertinentes al Gobierno de Navarra y contactar con la asociación Aranzadi, al frente de la cual trabaja el forense Francisco Etxeberria, comenzaron las labores de recuperación.

Entraron en la sima, rompieron un suelo de cemento y accedieron al interior, donde, según ha relatado, se encontraron con que, además de los tres cuerpos que esperaban, había siete más, lo que hace un total de diez.

Los restos han sido enviados al laboratorio de Aranzadi en Donostia, donde se realizarán los análisis convenientes y se cotejarán con una propuesta de identificación, que en el caso de que resulte positiva dará lugar a la entrega de los cuerpos a las familias y al Ayuntamiento de Eulate en los casos citados. Para ello habrá que esperar entre tres o cuatro meses.

En el resto, en el caso de que no se logre identificarlos, tendrán que decidir qué hacer con ellos, según Eceolaza, quien ha apuntado que una posibilidad sería devolverlos a la sima y rendirles allí algún tipo de homenaje.

Aunque no saben quienes pueden ser, sospechan que entre los siete fallecidos puede encontrarse una maestra republicana de Pamplona y además, como uno de ellos iba vestido de militar, creen que puede tratarse de «alguien obligado a alistarse a los tercios carlistas, que se escapó y cuando lo cogieron lo fusilaron».

La Asociación de Familiares de Fusilados de Navarra ha actuado a lo largo de diez años en 46 fosas, ha encontrado con éstos un total de 217 cuerpos y ha entregado a sus familias 88 restos.

Eceolaza ha subrayado que «cuando la asociación trabaja sobre una fosa y entrega los restos de un desaparecido a su familia no está resolviendo un problema individual o familiar, sino encarando un problema colectivo de la sociedad, porque no podemos seguir mirando para otro lado mientras hay cientos de navarros tirados en las cunetas».

Por eso, ha reclamado una Ley de Memoria Histórica que «trate de hacer este tipo de actuaciones desde el propio Gobierno de Navarra, de oficio».

Además ha apuntado que desde la asociación han pedido que se conceda el Premio Príncipe de Viana 2013 al forense Francisco Etxeberria, una demanda que cuenta con el aval del científico Pedro Miguel Echenique, Premio Príncipe de Viana y Premio Príncipe de Asturias de Investigación Científica y Técnica.

 

http://www.deia.com/2013/03/29/sociedad/euskadi/aumentan-a-diez-los-cadaveres-de-la-guerra-civil-recuperados-en-la-sima-el-raso-en-la-sierra-de-urbasa

 

La sima escondía nueve esqueletos

Un equipo de especialistas halla enterrados a 20 metros de profundidad en Navarra los restos de nueve fusilados del franquismo

Los asesinos tiraron a sus víctimas a una sima donde los pastores arrojaban al ganado muerto, en Urbasa (Navarra). Sus restos fueron hallados ayer, 76 años después del crimen, rodeados de los huesos de un caballo, una oveja, un cerdo y tres perros. Un equipo de 12 especialistas (forenses, arqueólogos, antropólogos…) trabajó durante todo el día a 20 metros de profundidad para rescatar los esqueletos de las nueve víctimas, fusiladas en 1936. Lo hacen de forma altruista porque ya no hay subvenciones para las tareas de recuperación de la memoria histórica.

A petición de los familiares, el equipo de la sociedad de ciencias Aranzadi, dirigido por el forense Francisco Etxeberria, realizó el pasado 23 de febrero una inspección en el interior de la sima para comprobar que los restos de las víctimas estaban allí. En un principio buscaban a tres personas. Abrieron un pequeño hueco en la tierra, se deslizaron por una vertical de diez metros y llegaron al fondo de la sima, a 20 metros y con forma de campana. Aquel día hallaron seis esqueletos, el doble de los que buscaban. Ayer, tras apartar varias toneladas de tierra, descubrieron tres más.

“Los restos presentaban signos evidentes de muerte violenta. En dos de los cráneos se aprecia el tiro de una pistola de calibre pequeño, con orificio de entrada y salida”, explica Etxeberria, que ha abierto más de un centenar de fosas del franquismo y el 8 de abril participará en la exhumación del poeta chileno Pablo Neruda.

Balbino García de Albizu busca en esta sima los restos de su abuelo, natural de Eulate. Balbino era guarda forestal, estaba afiliado a UGT y tenía mujer y ocho hijos el día que lo mataron, en septiembre de 1936, a los 59 años. Durante todo agosto, los falangistas le habían martirizado con un juego macabro: lo subían a Urbasa y simulaban su fusilamiento. El juego terminó el 7 de septiembre, cuando Balbino no regresó a casa. Año y medio después de su asesinato, en 1938, le citaron a comparecer en el juzgado de incautación de bienes. Naturalmente, no pudo acudir. Su viuda todavía tuvo que pagar 100 pesetas de multa a quienes habían propiciado el asesinato de su marido.


http://politica.elpais.com/politica/2013/03/27/actualidad/1364419385_033497.html

 

Hallan hasta 10 cuerpos de fusilados en la Guerra Civil en Urbasa

La Sociedad de Ciencias Aranzadi comenzó las excavaciones en busca de tres cuerpos y, hasta el momento, han recuperado los restos de 10 personas. La cifra podría aumentar en las próximas horas.